El Proyecto de Empresa.
Si no has montado una empresa en tu vida, puede ser que el concepto de Proyecto de Empresa te suene a postureo o a algo que solo las grandes empresas realizan. Nada más lejos de la realidad.
El proyecto de empresa es un instrumento que nos va a permitir plasmar todas las ideas que tenemos en nuestra cabeza, de manera que podamos estudiar la viablididad del proyecto.
¿Cómo inicio mi proyecto de empresa?
Esta es la parte más divertida, en la comienzas planteándote cuál va a ser tu actividad, los productos o servicios que vas a ofrecer, cómo va a ser su logotipo… Cuanto más concretes en los detalles más fiable va a ser tu proyecto.
Pero antes de adelantar acontecimientos, vamos a estructurar los contenidos que debemos tener en cuenta a la hora de redactar nuestro proyecto.
LA IDEA – donde vamos a explicar quiénes somos, qué hacemos, para quién lo hacemos, cuáles son nuestros objetivos…
ESTUDIO de MERCADO – Es uno de los factores diferenciales de nuestra empresa. Aquí es donde se valora tanto el macroentorno como el microentorno.
A la hora de tratar el análisis del Macroentorno, debemos considerar tanto factores políticos, como demográficos, económicos, jurídicos, socioculturales y tecnológicos, ya que si conocemos cómo funciona nuestro mundo actual, vamos a poder dar una respuesta muy satisfactoria y rentable que tendrá buena acogida en el mercado.
Cuando nos enfrentamos al análisis del Microentorno, en primer lugar debemos ser muy meticulosos a la hora de conocer cuáles son nuestros clientes, a quién nos dirigimos, de qué manera lo vamos a hacer, ya que si no tenemos el público suficiente, no vamos a poder prosperar en nuestra empresa.
Por otro lado, y no menos importante, conocer cuáles van a ser nuestros proveedores, tanto de consumibles, como de inmovilizado, etc.. va a conseguir que nuestros productos o servicios sean de calidad y consigamos ahorros significativos.
Por último, dentro de este punto, vamos a posicionar a nuestros competidores, ya que van a ser los contrincantes en el mercado, y con los que vamos a tener que compartir nuestro público. Sabes qué, cómo lo hacen y por cuánto es muy importante para saber en qué posición nos encontramos dentro de ese nicho de mercado.
ANALISIS DAFO – Este tipo de análisis es de los más conocidos. Trata de hacer una reflexión sincera de nuestras Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades. Si somos capaces de detectar nuestras debilidades, podemos encontrar el camino para suplirlas. Muchas veces parten de la experiencia, que es escasa, o bien de nuestra formación. En ambos casos son fácilmente subsanables con el tiempo y esfuerzo. Lo mismo sucede con nuestras oportunidades. Saber enfocar cuáles son y en qué puede mejorar mi empresa si las aprovechas, es lo que va a hacer que podamos posicionarnos frente a la competencia con carácter diferenciador, o adoptar iniciativas que en principio por falta de recursos o cualquier circunstancia, no hemos podido desarrollar.
PLAN de MARKETING – el concepto del marketing es muy amplio. Pero no solamente partimos del concepto de venta puro y duro, sino que debemos abarcar desde el diseño del producto o servicio, conocer muy bien todo el proceso hasta que llega a nuestro cliente final, el estudio del precio en base a los costes totales que vamos a tener, y el beneficio que deseamos obtener, los mecanismos de comunicación y publicidad a adoptar a la hora de llegar a nuestro cliente, así como la distribución de nuestros productos.
Dentro del plan de marketing, no debemos olvidar lo importante que es crear una buena imagen de marca dentro del mundo de las redes sociales. Hoy en día, gracias a este tipo de plataformas digitales, somos capaces de llegar a más gente en menos tiempo. Un buen diseño y una buena estrategia nos permitirá crear embudos de ventas, dar a conocer nuestra marca, presentarnos a posibles candidatos para futuras incorporaciones de personal…
FORMA JURÍDICA y TRÁMITES – Esta es la parte más engorrosa. Muchas personas prefieren delegar el papeleo a algún administrador o gestor que le realiza los trámites burocráticos a la hora de constituir su empresa. Con independencia de quién sea la persona que realice dichos trámites, debemos conocer qué significa ser autónomo, que conlleva tener una SL, los trámites que debemos realizar tanto para la constitución como para la puesta en marcha, ya que todo ello conlleva una serie de costes que debemos considerar e incluir en nuestro presupuesto.
ORGANIZACIÓN y RECURSOS HUMANOS – Si es una empresa pequeña, una empresa familiar, por norma general en ella va a trabajar el autónomo y posiblemente algún familiar o socio, pero si nuestra empresa tiene éxito, rápidamente vamos a tener que ampliar nuestro equipo para poder dar una respuesta de calidad a nuestros clientes. Por este motivo tenemos que conocer cuáles son los puestos o actividades que se deber realizar, así como los costes de esos trabajadores.
Realizar un pequeño organigrama con funciones por puesto, así como los perfiles de los trabajadores, modelos de contratación, etc… nos va a ahorrar tiempo y dinero a la hora de hacer las selecciones de personal.
PRESUPUESTO Y FUENTES DE INGRESO - Parece una obviedad, pero en muchas ocasiones tenemos una idea de negocio y pensamos en competir dentro del mercado ofreciendo mucha calidad a un precio muy bajo. Como idea está genial, y si somos capaces de materializarlo, sería estupendo. Lo importante, antes de comenzar, es tener muy claro cuáles van a ser nuestros costes fijos y variables y qué precio va a tener nuestro producto o servicio. Dentro de los precios que nos marca el mercado, sabiendo el coste por unidad, ya sea de producto, de tiempo, … y conociendo cuál va a ser nuestro beneficio, podemos ajustar nuestro precio a la idea que tengamos.
No siempre ofrecernos como los más económicos o como los más caros es positivo para nuestra empresa. Hay que buscar el equilibrio entre la calidad del producto que se ofrece y el precio que estaríamos dispuestos a pagar por él.
Estos son algunos de los pasos que debes tener en cuenta a la hora de confeccionar tu plan de empresa. Una vez que hemos anticipado cada uno de ellos, puede ser que se sucedan de esa manera o de otra, pero teniendo ya un plan A, siempre podemos ir buscando planes alternativos o situaciones excepcionales, y de esta manera reaccionar de la mejor forma posible ante una situación anómala.
Lo más importante es la satisfacción del cliente:
Cuando queremos saber cómo estamos realizando nuestro trabajo, lo más importante es conocer cuál es la opinión de nuestros clientes con respecto a todos los factores que componen su experiencia.
Existen muchos ejemplos en el mundo empresarial de cómo los pequeños detalles son los que marcan la diferencia entre una buena experiencia del cliente y una mala…. O algo mucho peor, que el cliente salga indiferente de nuestro negocio.
Para poder conseguir que esa experiencia sea positiva, y sea el propio cliente quien se encargue de hablar bien de ti, tanto a sus conocidos, como en redes sociales, has de ser conocedor tanto de lo bueno como de lo malo, mediante preguntas directas, cuestionarios anónimos, etc. Toda esa información, saber analizarla para poder modificar aquellos aspectos que no te son tan favorables, y potenciar y resaltar aquellos que son diferenciadores, sobre todo de tu competencia.
La frase “el cliente siempre tiene la razón” hay que aplicarla, pero de la manera más sensata posible. No siempre todos llevamos la razón, pero por norma general, si un mismo error se ha producido de manera reiterada, debemos saber que somos los únicos responsables. Saber gestionar los errores y procurar no discutir con el cliente, ya que incluso los fallos son parte de esa experiencia.
Hablando sobre un cliente insatisfecho, la gestión de conflictos, sea cual sea el escenario, es crucial en cualquier ámbito, y mucho más si es nuestra empresa. Ser asertivo, ponerte en la situación del cliente, analizar la fuente del conflicto, … te va a ayudar a poder gestionar cualquier situación a la que te enfrentes.
Es importante que conozcas cuál es la opinión que tus clientes tienen sobre tu empresa y producto, pero… ¿lo saben los demás? Por eso es tan significativo dar a conocerlo al mundo. Y para este tipo de acciones no hay nada mejor que los perfiles de empresa en internet, donde cada uno puede contarlo, haciendo valoraciones generales, o más particulares, dependiendo cada uno de los casos y la plataforma empleada.
Para poder obtener el éxito en nuestra empresa, la mejor manera que tenemos es mediante la formación en todo aquello que sabemos que nos falta complementar para poder tomar decisiones correctas y efectivas.
Este tipo de formación no es cara. Es cierto que existen programas como la formación bonificada para empresas, que ofrece un crédito anual el cuál puedes dedicar a la mejora de tus propios conocimientos, así como los de tus recursos humanos.
Organizar un buen plan de formación para tu empresa te permite:
En este aspecto, muchas empresas no quieren que su plantilla emplee tiempo de la jornada laboral, ya que los horarios no se pueden ajustar más, y como es lógico, hay que dedicarle todo el tiempo posible al trabajo. Por eso podemos hacer uso de la formación online, mediante cursos muy completos, ya que incluyen contenidos audio-visuales muy dinámicos, y que permiten que estén actualizados de manera constante. Este tipo de formación es accesible 24/7 desde cualquier lugar, y suele contar con un tutor personalizado.
Para finalizar, y como resumen de este post, me gustaría sintetizar la esencia para
conseguir el éxito en nuestro negocio en una serie de
conceptos clave: buena planificación, anticipación frente a los cambios, dedicación y formación.